Los dinner clubs son grupos de gente que, partiendo de la base de que sus miembros tienen una afición común, se reúnen periódicamente para cenar en casa de uno de ellos. Estas reuniones empiezan a ser una institución en los Estados Unidos. En realidad, para formar parte de ellos no hace falta que se comparta una afición determinada sino meramente el deseo de conocer gente nueva. En Ellensburg están bastante extendidos los dinner clubs para parejas que desean ampliar su mundo social.
La persona a cargo de formar estas redes sociales no lo hace movida por el interés pecuniario sino por el altruismo, ya que el dinero recaudado en cada una de estas reuniones, 10 dólares por pareja, va destinado a financiar las carreras universitarias de estudiantes con ingresos bajos.
Puede parecer que una sociedad en la que hace falta planificar las relaciones sociales no es del todo sana. Sin embargo, conviene realizar algunas apreciaciones. La movilidad geográfica, pese a la crisis inmobiliaria, sigue siendo muy importante en este país, y muy especialmente en las ciudades universitarias (college towns) donde el trasiego de profesores y personal de administración es constante. El riesgo de desarraigo, de llevar una vida solitaria y centrada en el trabajo está siempre ahí. Otra razón es que en este tipo de ciudades las relaciones entre el personal universitario y la población autóctona no suelen ser a veces tan fluidas debido a cuestiones como las circunstancias socioeconómicas y a la citada movilidad geográfica. Los dinner clubs, en los que coinciden personas nacidas y crecidas en la ciudad y nuevos profesores, son una buena manera de hacer comunidad.
Personalmente, pienso que este tipo de iniciativas demuestran varias características de la psique americana que deberían resultarnos atractivas. Primero, que por debajo de esa fachada individualista del americano, simbolizada por la figura del cowboy, siempre hay un anhelo de comunidad. Segundo, que la sociedad civil está muy viva, detrás de estas iniciativas no hay organizaciones muy estructuradas sino simplemente personas individuales que, sin reunir ninguna capacidad ni liderazgo especiales, se sienten capaces de levantar un proyecto, su proyecto. Por último, para mi son un símbolo de la psique americana que entiende que para que suceda algo (incluido tener amigos o expandir el círculo social) se requiere de un esfuerzo organizado, deliberado, que excluye el azar.
¿Qué opináis sobre los Dinner clubs? ¿Participaríais en uno de ellos?
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