La verdad es que, a tenor de lo visto en pantalla tras la correspondiente selección de la reportera y el productor del programa, no parecía que vivir en el Kentucky rural fuera jauja. El documental, quizás con alguna que otra década de retraso, insistía en todos los tópicos ya conocidos incluyendo la comida de acción de gracias (que se presentaba en su versión mas pesada y grasienta), la vida en el coche ejemplarizada en ver como se podían depositar cheques sin bajarse uno del vehículo, el paisaje semiurbano de los car dealers y una pequeña incursión en el black Friday que es el día de rebajas que sigue al de Acción de Gracias y en el que los bargain hunters (cazadores de gangas) forman colas a la puerta de los centros comerciales que abren durante toda la noche.
Viendo el reportaje, que hacía sentir cierta pena por la protagonista forzada en su vida diaria a consumir comida de poca calidad y a vivir en un lugar exento de distracciones, la verdad es que no parecía que hubiera demasiadas razones para vivir en los Estados Unidos más allá del tamaño de las casas o las sentimentales derivadas del azar que son las que siempre suelen argüirse. Sin embargo era muy obvio que esta mujer no quería regresar a León ni a tiros aunque decía echar mucho de menos a su familia y la cultura del tapeo. Y no era solo porque tuviera un trabajo aparentemente bueno en un college privado.
Lamentablemente en este tipo de reportajes se nos suelen hurtar esas razones, los intangibles del día a día que en muchos casos tienen su reverso negativo en la vida española. En el siglo XXI Estados Unidos sigue siendo el país del mundo donde más gente quiere vivir y no son solo ciudadanos provenientes de países en vías de desarrollo. ¿Por qué? Algún día me gustaría que se contara en este tipo de reportajes en los que lo más importante siempre parece omitirse.
Me encantan estos programas. Yo vivo en Albacete y tenemos la versión Manchega (Castellano-manchegos por el mundo). La verdad es que alimentan mis deseos por ir a vivir a otros países. Y más concretamente a USA, país en el que me encantaría vivir (yo soy uno de esos interesados en ir para allá). Estoy de acuerdo en que algunos programas son muy cutres y solo reflejan tópicos, pero también hay algunos que son ilusionantes y te dejan con las ganas de coger el primer avión que salga para allí. Creo que la clave está en las personas a quién escojan.
ResponderEliminarMe alegra que haya mucha gente que piense como tu y que entienda que estos programas hay que tomarlos con un grano de sal. Me apena que habiendo tanta inflacion de los mismos, no se hagan con un poquito mas de profundidad.
ResponderEliminarUna vez que llegas a vivir a USA, NYC en mi caso, te das cuenta que lo mejor de los americanos es el marketing. Nada es como parece. Hay que informarse muy mucho antes de venir y hay que tener un caracter y una forma de vivir/relacionarse muy distinta a la del espanol medio. Esos programa de los que hablas muchas veces desinforman de la realidad y dan a la gente una ilusion irreal de lo que es salir fuera. yo me he encontrado en NY mucha gente decepcionada.
ResponderEliminarMuy bueno tu blog. felicidades.